
Nuestra historia
El espíritu emprendedor de una familia mexicana dio nacimiento al restaurante Ave María en el legendario Jardín Centenario del centro de Coyoacán. Su nombre “Ave María” se debe a que en el arco del zaguán principal tiene grabado ese nombre en sus antiguas piedras de cantera. Al ver el nombre en las piedras y devota como es de la Virgen María, la familia decidió registrar “Ave María”.
Desde sus inicios el milagro se hizo patente, pues a los pocos días de su apertura, la clientela acudió con entusiasmo y en número considerable. Fue el primer restaurante en colocar un techo retráctil en su terraza y hoy parece ser el único que lo conserva. Desde la vistosa terraza que da al Jardín Centenario, se aprecian las magníficas plantas y flores que el Ave María siembra y cuida con esmero para deleite de sus comensales que aprecian su belleza y colorido.
Deliciosos platillos mexicanos e internacionales, rodeados de bullicio y tradición. El Ave María los espera con los brazos abiertos donde día a día...“La comida es un milagro”